Se nota que es una solución salina de calidad. No irrita nada y el formato spray está muy conseguido para que no te pases con la presión.
Me lo recetó el otorrino para mi hija y ha sido un acierto. Ya no se queja de dolor de oídos y la cera está bajo control
Lo compramos por recomendación de la pediatra porque el niño es muy ceruminoso. Le reblandece la cera que da gusto y así evitamos tener que ir al médico a que se lo quiten. Repetiremos seguro.
Antes se rascaba muchísimo, supongo que por la cera seca. Con este spray, la mantiene a raya. Se le ve mucho más cómodo.
Cumple lo que promete: higiene diaria para prevenir. Es muy cómodo, lo dejo al lado del cepillo de dientes y se lo pongo después de la ducha. Perfecto.
Lo usamos cuando vemos que tiene cera un poco más dura. Unos días de Otospray Junior y luego ya se le va cayendo sola. Nos ahorra viajes al ambulatorio.
Antes era una guerra limpiarles los oídos, ahora con el spray es coser y cantar. Se lo pongo en la bañera y listo. La cera sale solita. Recomendadísimo.
Lo compré para mi hijo que es un poco reacio a que le toquen los oídos, y la verdad es que la experiencia ha sido muy positiva. Le alivia y no protesta. Lo único que me parece un poco caro, pero funciona
Lo uso con mis dos hijas y es genial. No irrita, no molesta y mantiene sus oídos sanos. Es un básico en nuestro botiquín. Recomendadísimo
Increíble. Mi hija de 6 años siempre con cera y desde que usamos el Otospray, sus oídos están limpios como una patena. Y a ella le parece un juego, no se queja del 'pispis' en el oído
¡Fantástico para mis peques! Tenían un problema de tapones y con este spray se les ha solucionado. Además, les gusta porque no les molesta nada. Un 10.
Lo mejor de la versión Junior es la boquilla, que es mucho más suave que la normal. Mi hijo, que es muy sensible, lo acepta sin problemas. ¡Un alivio para las duchas!
Con tanta piscina, nos ayuda a prevenir las otitis externas. Lo usamos dos veces por semana y cero problemas. Un básico para el botiquín de verano.
Mi hija tiene los oídos muy delicados y le va de lujo. Otros sprays le picaban, pero este, al ser tan suave, lo tolera muy bien.
¡Un salvavidas! Mi hijo ya no se rasca los oídos. Se lo pongo después de la ducha y es un ritual que le encanta