Lo que más me gusta es el olor. No es nada empalagoso, muy suave, como a limpio. Y te deja la piel hidratadísima sin esa sensación aceitosa que da tanta rabia. ¡Chapó por Isdin!
Lo uso después de la ducha con la piel un poco húmeda y te deja un brillo muy chulo. Mis cicatrices de un golpe se notan menos, ¡flipante!
Tenía unas estrías rojas recientes y, aunque no han desaparecido, el color se ha atenuado bastante desde que uso este aceite.
Soy muy perezosa con las cremas, pero este aceite se aplica en un momento y se absorbe volando
Ya no me ducho sin tenerlo a mano. Un par de pulsaciones bastan para las piernas y el abdomen.
He notado la piel mucho más firme en los muslos. Mi marido hasta me dice que tengo la piel más suave. Lo volveré a comprar seguro
El envase es pequeño, pero cunde un montón. Para mí, el mejor aceite corporal que he probado