Las mejores para los niños. No se las quitan al momento como con otras tiritas, y no les pican.
Me las recomendó mi madre y desde entonces no uso otras. No se despegan fácilmente y no irritan la piel.
No están mal. Se me despegaron un poco al lavarme las manos, pero aguantaron más que otras que he probado.
Top. Me las llevé de viaje y me salvaron un par de veces. Además, no ocupan nada en la mochila.
Siempre llevo un par en el bolso por si acaso. Se adhieren bien y no molestan nada.
Un básico en el botiquín de casa. Son resistentes, cómodas y no dejan residuos al quitarlas.
Cumplen su función. No son las más baratas, pero pegan mejor que otras marcas del súper.
Me han venido bien para rozaduras de zapatos. Aguantan bastante bien el trote del día.
Perfecto