Me ha sorprendido para bien. Se limpia fácil, no huele, y puedo hacer deporte sin problemas. Mucho mejor que los tampones.
Me daba respeto al principio, pero ahora me siento supersegura con ella. El aplicador ayuda si eres nueva, pero luego es fácil ponerla sin él.
Encantada con esta copa. No irrita, no gotea y dura mucho. El aplicador es un plus para principiantes, aunque yo ya no lo uso
¡Ojalá haberla descubierto antes! Nada de compresas ni tampones, supercómoda y sin fugas. La talla L me va genial, aunque al principio me daba miedo que fuera grande
Me ha costado un poco aprender a ponerla bien, pero una vez lo consigues, es una maravilla. Me ahorro dinero y es más ecológica. Lo único es que el aplicador no siempre me resulta útil.
Me ha costado acostumbrarme, pero ahora no la cambio por nada. No noto que la llevo y puedo pasar horas sin preocuparme
Está bien, pero cuesta encontrar la postura adecuada para que no haya fugas. El aplicador ayuda, aunque no es infalible.
Buena copa, pero el aplicador no me convence del todo. Al final prefiero ponerla sin él. Aun así, la copa en sí es de calidad y no da sensación de sequedad.
Me ha cambiado la vida. Al principio cuesta pillarle el truco, pero con el aplicador es mucho más fácil. Cómoda y no noto que la llevo puesta.
Funciona genial y no se mueve nada. Me costó aprender a sacarla sin liarla, pero una vez pillado el truco, todo bien.